¿Te encanta el ajo pero prefieres comerlo sin su olor fuerte y persistente? Existe un método para eliminar el olor y solo una cucharada de un ingrediente es suficiente para lograr este efecto. ¡Veamos cómo hacer ajo en escabeche!

ajo en el tarro

Muy utilizado en la cocina pero también excelente por sus propiedades curativas, el ajo es un alimento que gusta mucho y no puede faltar en ciertas recetas porque está indicado para condimentarlas. Perteneciente a la familia de las liliáceas , el ajo es una planta útil para los sistemas inmunológico, circulatorio y respiratorio y es excelente para tratar gripes y resfriados.

Conocido desde la antigüedad, ya fue utilizado por los egipcios en el tercer milenio antes de Cristo y luego también por los griegos, romanos, indios y chinos. Cruda o cocida, se utiliza para dar más sabor a guisos, salsas, platos de carne y pescado, verduras y mucho más. También muy utilizado para preparar embutidos, el ajo se utiliza en grandes cantidades en la industria conservera para la preparación de aperitivos en vinagre y en aceite.

Sin embargo, lo que molesta en este condimento es el fuerte olor que queda en la boca , pero por suerte existe el método del ajo encurtido para eliminarlo. ¡Aquí te mostramos cómo preparar esta receta que tiene orígenes muy antiguos!

Lo que se necesita para preparar el ajo en escabeche

Los ingredientes que necesitas para preparar el ajo en escabeche son bastante sencillos. Esto es lo que necesitas:

  • 2 kilos de ajo en bulbos
  • 1 cuchillo
  • 3 botes de cristal con tapa
  • Agua fría

Las cabezas de ajo deben estar frescas y firmes, de lo contrario la preparación en escabeche no garantiza el resultado deseado. Con el método de salmuera puedes disfrutarlo donde prefieras y sin la molestia del olor persistente.

Ajo para el cuidado de las orquídeas

Procedimiento para hacer ajos en escabeche

Una vez que tenga todo lo que necesita para preparar ajo en escabeche, así es como debe proceder:

  • Limpie la cáscara y las raíces superiores, desechando la envoltura exterior.
  • Cortar el tallo de las cabezas de ajo con el cuchillo.
  • Realice el procedimiento en todas las cabezas y dispóngalas en un plato.
  • Transfiera el ajo a un tazón grande y vierta agua fría sobre él.
  • Remojar las cabezas de ajo en agua durante un día.

Una vez transcurrido el tiempo, retira el agua colocando los ajos en un colador y escurriéndolos bien. A continuación, vuelve a poner el ajo en el bol y vuelve a añadir agua fría hasta cubrirlo. Déjalo en remojo para otro día.

Al tercer día, vuelve a escurrir el agua y vuelve a poner el ajo en el bol. Por tercera y última vez, añade agua fría, tapa y deja en remojo un día más. Saca el ajo del agua una vez más y vuelve a colocarlo en un recipiente limpio.

ajo en el agua

La sal es capaz de eliminar el sabor a ajo.

En este punto, habiendo completado el procedimiento de inmersión de 3 días para el ajo, es hora de ponerlo en frascos de vidrio. Luego comienza a acomodar los bulbos en los frascos, teniendo cuidado de colocarlos de manera que dejen poco espacio entre ellos, hasta llegar a la boca.

ajo - remedio contra las cucarachas

Ponga 1 cucharada de sal en cada frasco y agregue agua fría a cada uno, hasta casi llegar al borde. Tapa y cierra bien los botes y agítalos uno por uno para que la sal se disuelva bien en el agua. Ahora es el momento de guardarlo y podrás mantenerlo fresco sin ningún problema. La sal actúa en este período con su acción exfoliante y reduce el olor a ajo.

Pasados ​​los 3 meses ya puedes utilizar el ajo y verás que será más fácil de digerir y habrá desaparecido su fuerte sabor, pero en cambio tendrá un sabor más delicado y apreciable.

Así preparado, el ajo tendrá un sabor decididamente menos intenso y dará el mismo sabor a tus platos, por lo que podrás usarlo donde quieras. Ideal para degustar en todas las preparaciones en las que no añadiste ajo porque el efecto te parecía demasiado, lo puedes utilizar como prefieras y también para preparar apetitosos aperitivos!